Adwords: el día en que Google dio el sí
Si algo caracterizaba el modo de trabajar de la firma Google, allá por sus inicios hacia fines de los noventa, era su estricta política de no introducir publicidad en sus sistemas. Pero sin dudas un hombre razonable es aquel que escoge cambiar de pensamiento frente a nuevos horizontes: Google, desde ya, es una empresa sumamente razonable.
O por lo menos, así lo ha sido desde el nuevo milenio: fue precisamente en el 2000 cuando anuncio su incursión en lo que denomina sistemas de publicidad Adwords.
A partir de allí se lanzó todo un mundo de alternativas para quiénes están pendientes de los buscadores como, justamente, los profesionales del diseño web. Google abrió una puerta y, para todos esos trabajadores, se abrió una ventana: en la actualidad la facturación del buscador por antonomasia se basa, principalmente, en las propagadas que aloja en otros sitios (una marca). Y, a su vez, la mayoría de las web que gozan de éxito reciben gran cantidad de dividendos gracias a la repercusión que genera cada clic dado en un anuncio de Google.
De acuerdo a esos términos, una empresa de comunicación por Internet no difiere mucho de otras que se halla en radio o televisión: la facturación más grande provienen de las publicidades, es decir, el valor se mide de acuerdo al crecimiento de una marca.
Efectivamente, el marketing online también trabaja para transformar un espacio en una marca. La repercusión es la clave y, para esa labor, Adwords es la primera opción para publicitar y generar prestigio que deben buscador los especialistas del diseño sitios web.