
¿Qué hace que alguien sea spammer? Un 0,2% la tasa de denuncia
Antes de descubrir si eres un spammer o no, vamos a ver la definición de spam. Contrariamente a los mitos populares acerca de ciertas palabras clave, color de fuente, puntuación o frecuencia de envío que pueden disminuir la entregabilidad del correo electrónico, los hechos son mucho más simples: se trata de la reacción de los usuarios reales.
Serás tratado como spam si llegas a 0,2% la tasa de denuncia. Esto es. si 2 o más en 1000 de los destinatarios pulsan en el botón “Denunciar spam” en tu mensaje serás un spammer.
¿Eres un spammer?
Tal vez no quieras esto, tal vez incluso no lo sabes, pero usted eres un spammer. A continuación encontrarás las descripciones más comunes de los spammers. ¿Crees que te puedes identificar con alguna de ellas?
Falta de empatía- ¿Por qué debería importarme?
No consideras el permiso de los usuarios como un criterio clave para la inclusión de sus direcciones en tu lista de correo. Envías emails sin ni siquiera preguntar a:
- Los clientes si estaban de acuerdo.
- Los usuarios que escribieron a un correo electrónico con una pregunta o un problema,
- Los usuarios que te contactan por otros motivos,
- Bases de datos compradas a terceros,
Se honesto: si encontraras un documento de direcciones de correo electrónico en la calle lo usarías.
El problema de lo qué siente el usuario cuando recibe tu email nunca se cruza por tu mente o no lo consideras suficientemente importante como para dedicar atención a ello.
Cinismo, ya sé que envío basura.
Si no informas a los visitantes que vas a utilizar su dirección con fines de marketing, porque piensas que podrías disuadirlos de darse de alta por miedo a recibir correo basura te podemos asegurar que los correos no deseados son peores.
Cuando ves tu propio correo como spam, no es de extrañar que tus clientes hagan lo vean igual. Esto es un problema tuyo y de tus contenidos, no de tus clientes.
Falta de realismo, las probabilidades juegan a nuestro favor
Teóricamente hablando sabes que los receptores no quieren recibir tus emails pero crees en la buena suerte. “Tal vez, por casualidad, alguien de esa base de datos va a querer comprar mis productos, quién sabe, nada indica tal posibilidad, pero no vamos a ser lógicos que es muy aburrido”
Por supuesto. Existe la posibilidad de que alguien tenga la necesidad de compra de tus productos. Sin embargo: ¿se puede basar la estrategia a largo plazo en el azar ignorando la voluntad de tus usuarios?
Es un ignorancia total de la realidad. Al otro lado de la pantalla hay personas reales que reaccionan a tus mensajes. Ellos marcarán tu email como spam y harán que tu reputación se desplome.
Romper las promesas
Imagina que tienes un tienda online de alimentación y tuviste una gran idea para educar a tus contactos, un curso de dos meses sobre ciertos alimentos en particular, su historia, su uso, incluyendo recetas de lujo. Gran contenido original, en base a tu conocimiento experto y a tu experiencia. Dos veces a la semana el usuario recibe un email informativo.
Una gran idea. Pero si un nuevo usuario que contrató ese curso en particular se incorporara a tu lista de correo y empezara a recibir newsletters, además de los emails a los que se suscribió podría quedar decepcionado tanto por su calidad como por el hecho de no haberse suscrito.
Has desperdiciado una idea genial y perdido un cliente. Quizás estabas pensando, “Bueno, si le doy algo, quiero algo a cambio, es decir, la exposición a la comercialización”.
Debería haber esperado un par de meses a que hubiera terminado la información del curso que le estabas enviando, transcurrido ese periodo podrías pedirle permiso para enviarle tu newsletter. La gente suele ser generosa y acepta cuando recibe algo a cambio y no se siente engañada.
¿Quieres ser más list que tus clientes?
Utilizas “Re:” o “Fwd:” en el asunto para que se vea como una parte de la conversación anterior, o usas un asunto totalmente engañoso, o das un nombre de remitente falso.
Utilizas tantos trucos para hacer que el usuario abra el mensaje que se le olvida por qué en realidad intentaba hacerlo. ¿Qué va a hacer un destinatar